Estas coloridas mantas cortas, que carecen de la sobriedad de los makuñ o ponchos largos, son usadas por los hombres en las festividades. Se relacionan con las mantas corraleras de los “huasos” de la Zona Central, pero se diferencian de ellas por su iconografía, que incorpora diseños propiamente mapuches. Una de ellas lleva la figura de un jinete a caballo y abajo, las iniciales de su dueño. Estas prendas son tejidas por las madres o las esposas de sus portadores.